
Nueva soja ultraresistente aprobada en Argentina: ¿una oportunidad para productores paraguayos?
Una nueva variedad de soja genéticamente modificada, desarrollada por la empresa BASF, ha sido recientemente aprobada en Argentina, tras pasar por rigurosas evaluaciones de seguridad alimentaria y ambiental.
Una nueva variedad de soja genéticamente modificada, desarrollada por la empresa BASF, acaba de recibir luz verde en Argentina. Se trata de un avance biotecnológico que podría interesar de cerca a los productores paraguayos, especialmente ante el aumento de pérdidas causadas por el nematodo del quiste de la soja (Heterodera glycines), una amenaza que ya está haciendo estragos en el país.
En Paraguay, según datos del IPTA (Instituto Paraguayo de Tecnología Agraria) y estudios de la DEAg, los nematodos representan una de las principales causas de pérdida de rendimiento en soja en zonas productivas clave como Alto Paraná, Itapúa y Canindeyú. Se estima que las pérdidas directas por Heterodera glycines pueden superar el 20% del rendimiento en lotes infestados, con picos que alcanzan el 30% en suelos arenosos o de alta presión parasitaria. A pesar de su impacto, muchas veces el daño pasa desapercibido o es atribuido a deficiencias nutricionales o estrés hídrico.
Frente a esto, la nueva soja aprobada en Argentina se presenta como una opción prometedora. Combina dos eventos previamente autorizados, brindando tolerancia múltiple a herbicidas (HPPD, glifosato, glufosinato de amonio y 2,4-D) y, lo más destacado, resistencia al nematodo del quiste. Las evaluaciones realizadas por SENASA y CONABIA en Argentina confirmaron que las proteínas expresadas actúan en rutas independientes, sin efectos adversos en el agroecosistema ni riesgos para el consumo humano o animal.
¿Qué significa esto para Paraguay?
Aunque aún no se ha presentado una solicitud de aprobación local, este desarrollo representa una alternativa valiosa para el futuro inmediato del sistema productivo paraguayo. Los productores del país podrán seguir de cerca su desempeño en campos argentinos durante esta campaña. Si los resultados son positivos y se avanza con la habilitación en Paraguay, esta soja podría convertirse en una herramienta clave para sostener los rindes en zonas afectadas y reducir las pérdidas invisibles asociadas a nematodos.
Por Samuel Sosa.